Segunda experiencia en este lugar y esta vez no fue nada agradable. Solo recomendable para una- dos noches en invierno. Del calor no pude dormir la última noche (con 20 grados afuera). No hay ventilación, más que unas ventanas que se abren ridículamente y por la que si entra ruido. El baño es obscenamente pequeño - no apto para dos personas. El gym ahora es pago y la mujer grande +40 de turno noche (no mujer +40 del día) me pareció bastante desagradable. Lavandería cara y tengo una alergia hasta el día de hoy en mi cuerpo. También puede ser por las toallas, que se veían viejas y percudidas. Cocina compartida, bien. El hotel está bien ubicado. A 700 metros de Fields (gym Sats, locales de ropa y variedad para comer) del Metro.