Elegimos el lugar para pasar tiempo en familia, un cumpleaños del abuelo. El hotel en general está muy bien. Las habitaciones son espaciosas, aunque la limpieza podría ser un poquito más esmerada. El resto de las instalaciones funcionan algunas sí y otras no. Excelente la señora que proporciona el servicio de spa y masajes. Excelentes las animadoras contratadas para los niños y adultos. Una lástima que el gimnasio se encuentre prácticamente abandonado, con los aparatos rotos y sólo dos o tres mancuernas. En cuanto al servicio de comidas y buffet en líneas generales está bien si la exigencia del paladar no es alta.Probablemente lo que haga falta es más personal para atender a los huéspedes, ya que son numerosos los contingentes que llegan para almorzar y desbalancean el momento. En las habitaciones es pobrísimo el servicio de tv por cable, ya que en realidad no existe como tal, sólo se ven unos cuantos canales, y de la tv pública. El entorno es fantástico para quien busca tranquilidad y naturaleza. También será de desear que quienes se encuentran en recepción manejen y brinden información precisa acerca de cuestiones tales como condiciones de cada reserva, ya que prácticamente tuvimos que hacer medio escándalo para que nos reconocieran el late check out pactado prácticamente con un mes de antelación (y tampoco tenían claro la hora del mismo)...A pesar de éstp, creo que subsanando estos inconvenientes, para manejarse con varios niños y siendo un grupo numeroso, es el lugar idea