Esta es una excelente opcion de alojamiento. El hotel excedió mis expectativas por mucho, lo que definitivamente hizo mi estancia en Merida muy placentera.
El hotel ofrece un espacio cálido, silencioso, bonito y limpio. Las camas y las sábanas son riquísimas. Con su trato amable y extremas atenciones, Pedro hace que tu estancia sea única. Paseo Montejo está a una cuadra, el recinto de hoteles y otras atracciones como el centreo de convenciones, la central de autobuses ADO, las plazas del Fiesta Americana y Paseo 60, o el hermoso Parque La Plancha a un par de cuadras. Tambien a dos cuadras se puede tomar el Autoprogreso por si quieres ir a Progreso un dia.
La unica recomendacion para los viajeros seria llevar repelente y/o insecticida porque, como en toda la ciudad, hay mosquitos que a veces se cuelan en los cuartos.
A los dueños solo les sugeriría ofrecer opciones más locales, frescas y/o saludables en el desayuno americano. A excepción de las manzanas y el café, las demás son productos procesados poco saludables como cereal de caja Kellogs, pan de caja, o pastelitos y galletas procesadas (mamuts, galletas procesadas...). Se podría sustituir esto facilmente con productos locales menos procesados y más baratos. Esto también haria al hotel demostrar aun más su compromiso con la sostenibilidad de nuestro planeta.